China ha puesto sus ojos en las exportaciones agrícolas de Estados Unidos mientras se prepara para implementar contramedidas en respuesta a los nuevos aranceles de importación anunciados por el presidente estadounidense Donald Trump. Según un informe del diario estatal chino Global Times, la situación aumenta la tensión en lo que podría convertirse en una escalada de la guerra comercial entre las dos principales economías del mundo.
Trump amenazó recientemente con imponer un arancel adicional del 10% a los productos chinos, el cual entrará en vigor este martes, lo que elevaría el total de los aranceles a un 20%. El mandatario estadounidense justificó esta medida acusando a Pekín de no hacer lo suficiente para frenar el flujo de fentanilo hacia Estados Unidos, una acusación que China ha considerado un «chantaje».
En respuesta, Global Times informa que China está preparando contramedidas que probablemente incluyan tanto aranceles como una serie de medidas no arancelarias, con los productos agrícolas y alimentarios estadounidenses como posibles objetivos. Aunque el Ministerio de Comercio chino y la embajada de Estados Unidos en Pekín no han respondido de inmediato a las solicitudes de comentarios, la situación refleja la creciente vulnerabilidad del sector agrícola estadounidense en tiempos de tensión comercial.
China es el mayor mercado para los productos agrícolas de Estados Unidos, y el sector agrícola ha sido históricamente una de las principales áreas afectadas por las disputas comerciales. A pesar de una disminución en las importaciones de productos agrícolas estadounidenses desde 2018, la imposición de nuevos aranceles sobre productos clave como la soja, la carne y los granos podría tener un impacto considerable en el comercio entre ambos países.
Genevieve Donnellon-May, investigadora de la Oxford Global Society, señaló que, aunque el sector agrícola estadounidense ha tenido tiempo para prepararse ante un segundo mandato de Trump y una posible intensificación de la guerra comercial, la situación sigue siendo compleja. «En teoría, los agricultores deberían estar mejor preparados para encontrar mercados alternativos, pero la realidad puede ser mucho más difícil de manejar», afirmó.
La noticia sobre las posibles contramedidas de China ya está afectando los mercados. Los futuros de harina de soja y harina de colza, que ya se enfrentaban a una escasez de suministro, experimentaron un aumento del 2,5% tras la publicación del artículo. El contrato de harina de soja en la Bolsa de Materias Primas de Dalian alcanzó su nivel más alto desde el 30 de septiembre de 2024, lo que indica que las expectativas de los inversores sobre el impacto de la guerra comercial están tomando forma en los precios de los commodities.
A medida que la tensión comercial entre Estados Unidos y China continúa, el sector agrícola de Estados Unidos podría enfrentar un periodo de incertidumbre, ya que las exportaciones agrícolas clave a China podrían verse gravemente afectadas por nuevas barreras comerciales.