El director en jefe del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica), Francisco Javier Trujillo Arriaga subrayó que los ingenieros agrónomos parasitólogos son los profesionales fitosanitarios mejor capacitados para llevar a cabo actos de autoridad de gran valía para el campo mexicano, entre ellos, la inspección de mercancías agrícolas y las certificaciones en materia de sanidad e inocuidad.
Aseguró que el compromiso que muestran más de seis mil técnicos ligados a la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural ha permitido que México sea el onceavo productor de alimentos agrícolas y el séptimo exportador, con un alcance de 192 países.
El funcionario federal encabezó la ceremonia de toma de protesta de la nueva mesa directiva de la asociación civil Ingenieros Agrónomos Parasitólogos (IAP), encabezada por Gustavo González Villalobos para el periodo 2022-2024, en relevo de José Abel Toledo Martínez, quien fue presidente del organismo de 2019 a 2021.
Felicitó a la Asociación por más de medio siglo de trabajo ininterrumpido, en el cual ha coadyuvado con el Gobierno de México y el sector productivo en tareas de investigación científica y divulgación para hacer más eficientes las acciones de prevención de plagas y enfermedades de los vegetales.
Trujillo Arriaga indicó que el gremio está listo para dar el siguiente paso y constituir un Colegio de Ingenieros Agrónomos Parasitólogos que cuente con facultades de ley y sea la voz calificada del sector para interactuar con la sociedad en temas como innovación, tecnologías sustentables y el cuidado de los polinizadores.
El director general de Sanidad Vegetal del Senasica, Francisco Ramírez y Ramírez, comentó que la parasitología agrícola es el soporte del conocimiento de las acciones fitosanitarias, las cuales se ejercen en beneficio directo de los productores, especialmente los de pequeña y mediana escala.
Señaló que gran parte de los técnicos del Senasica tienen esta formación académica, a los cuales se suman más de seis mil profesionales que participan como terceros especialistas en laboratorios de sanidad vegetal, en puntos de entrada al país y en los de verificación, entre otros.
El presidente saliente del IAP, José Abel Toledo Martínez, indicó que el perfil del ingeniero agrónomo parasitólogo cobra mayor relevancia en la actualidad, ya que los consumidores exigen que sus alimentos sean de calidad y seguros para su salud.
Hoy los consumidores, dijo, tienen voz y el poder de cambiar las políticas públicas y nosotros como parasitólogos tenemos que garantizar que lo que llega a su mesa sea sano e inocuo.
El nuevo presidente del IAP, Gustavo González Villalobos, agregó que las plagas y enfermedades son una de las principales limitantes para la producción agrícola de todos los países, por lo que la labor de los agrónomos parasitólogos es hacer valer la ciencia en la toma de decisiones.
Subrayó que en los próximos dos años, la asociación estrechará vínculos con la academia, organizaciones científicas, sector productivo, dependencias del gobierno federal y de los estados, a fin de coadyuvar en la actualización y creación de regulaciones, políticas y programas que impulsen al campo hacia una nueva visión sustentable e incluyente.