El Consejo Tlaxcalteca de Agricultura Natural, bajo la dirección de Javier Fragoso Moreno, ha logrado un significativo impacto en la agricultura sostenible en Tlaxcala al procesar, desde 2008 hasta 2024, un promedio de cinco mil toneladas de residuos orgánicos para la producción de fertilizante. Este esfuerzo tiene como objetivo la reducción de costos en la producción agrícola, la rehabilitación de tierras erosionadas y la preservación de los maíces nativos de la región.
La organización, que comenzó a colaborar con agricultores en 21 municipios desde 2007, fue impulsada por el aumento en los precios de los fertilizantes químicos y semillas mejoradas. Fragoso Moreno explicó que la organización se vinculó con los agricultores para ofrecer alternativas económicas y ecológicas, comenzando por la separación de residuos orgánicos generados en panteones, mercados e iglesias. Estos residuos, en lugar de ser enviados a los rellenos sanitarios, son aprovechados en la agricultura, convirtiéndolos en insumos valiosos para mejorar la calidad de la tierra.
De acuerdo con el dirigente, este proceso ha sido de gran importancia, ya que de las cinco mil toneladas de residuos procesadas, aproximadamente dos mil 500 corresponden a desechos urbanos, mientras que el resto proviene del ámbito rural. Fragoso Moreno destacó que este trabajo no solo contribuye a la mejora del campo, sino que también tiene un impacto positivo en la gestión de residuos, ya que diariamente unas 800 toneladas de residuos orgánicos se destinan a los rellenos sanitarios.
Uno de los logros más importantes de esta iniciativa ha sido la creación de una fórmula de fertilizante orgánico enriquecida con microorganismos de montaña y minerales, que ha permitido a los agricultores sembrar de manera exitosa maíz y hortalizas. Este fertilizante se comercializa a un precio competitivo de mil 800 pesos, lo que lo hace más accesible que el fertilizante convencional, cuyo costo puede superar los 2,200 pesos.
Además, el Consejo ha fomentado proyectos de economía social y solidaria en colaboración con universidades locales, como la Universidad Politécnica de Tlaxcala (UPTx). A través de estos proyectos, se han desarrollado mercados alternativos en municipios como Chiautempan, Apizaco y Huamantla, con el objetivo de promover productos agroecológicos en la región. También se trabaja en la búsqueda de un espacio en el mercado de Tlaxcala capital.
El Consejo ha obtenido cinco sellos agroecológicos otorgados por la Universidad Autónoma de Tlaxcala (UATx), lo que respalda la producción de productos como amaranto, nopal, y cochinilla de maíz. Esta certificación ha sido un paso clave para ofrecer productos agroecológicos de alta calidad a la comunidad.
La labor del Consejo Tlaxcalteca de Agricultura Natural sigue avanzando en su misión de promover prácticas agrícolas sostenibles y de bajo costo, y demuestra que la integración de residuos orgánicos en la producción agrícola puede tener un impacto positivo tanto en la economía local como en el medio ambiente.